Las noches son oscuras, las luces de neón brillan titileando en esas estrechas calles abarrotadas de gente. El sudor, el calor entre esos movimientos que mecen de un lado en un vaivén mareador es aquel ensordecedor bramido que guía como canción cada noche de la vida de los habitantes de la ciudad.
Tokyo es una ciudad que no duerme.
¿Esperabas tranquilidad? ¿Poder relajarte? Eres una estrella, debes pagar el precio de la fama.
Tal como lo dice el nombre, Sin City es la ciudad del pecado. Prostitutas/os, mafias, criminales, asesinos, drogas, lujuria, gula, avaricia, pereza, ira, envidia, soberbia, excesos... todo eso y más lo encontrarán en Sin City, también conocida como Tokyo. ¿Los honestos? La mayoría ha sido corrompido y los poco que no... pronto lo serán.
Un lugar donde se puede volar alto, muy alto, pero también se puede caer muy bajo...
Tokyo es una ciudad que no duerme.
¿Esperabas tranquilidad? ¿Poder relajarte? Eres una estrella, debes pagar el precio de la fama.
Tal como lo dice el nombre, Sin City es la ciudad del pecado. Prostitutas/os, mafias, criminales, asesinos, drogas, lujuria, gula, avaricia, pereza, ira, envidia, soberbia, excesos... todo eso y más lo encontrarán en Sin City, también conocida como Tokyo. ¿Los honestos? La mayoría ha sido corrompido y los poco que no... pronto lo serán.
Un lugar donde se puede volar alto, muy alto, pero también se puede caer muy bajo...